Tratamientos psicológicos bonificados parcialmente para discapacitados

Aunque buscamos atender al mayor número posible de personas, tenemos recursos limitados y criterios internos que nos obligan a priorizar casos según la urgencia y disponibilidad. En algunas situaciones, y si lo consideramos necesario, sugerimos acudir a la Seguridad Social u otros «servicios públicos» que puedan ofrecer la atención adecuada a una situación que requiera un tratamiento especializado o atendido por un equipo multidisciplinar en un plazo más corto.

Las personas con discapacidad pueden mostrar los mismos trastornos psicológicos que las personas sin discapacidad. No obstante, se encuentran diferentes factores biológicos, psicológicos y sociales que pueden desarrollar una mayor presencia en este grupo de personas.

La restricción o el impedimento en la disposición de ejecutar una actividad de forma normal para las personas, como resultado de un deterioro eventual o indefinido, reversible o irreversible supone limitaciones a nivel emocional y social en las personas y su entorno.

La discapacidad es más frecuente de lo que generalmente se suele creer, se considera que más de mil millones de personas presentan algún tipo de discapacidad (alrededor del 15% de la población mundial).

Los psicólogos de Canvis no somos ajenos a la realidad económica, familiar y social actual que sufren las personas con discapacidad. Sabemos lo difícil que resulta habituarse a la nueva realidad en la que se encuentran. Ante diversas dificultades que se presentan en cambio bruscos en su ritmo y nivel de vida hay que encontrar herramientas para superar esta crisis y adaptarse a la nueva situación.

Por ello, el centro sanitario de psicología clínica Canvis de Barcelona, ha creado un programa de tratamientos psicológicos bonificados parcialmente destinado a las personas con discapacidad y escasos recursos económicos que necesitan apoyo por parte de un psicólogo profesional.

El apoyo psicológico a personas en situación de discapacidad reconocida por parte de los psicólogos de Canvis tiene honorarios reducidos en diferentes modalidades de terapia para que, todas las personas que lo requieran y necesiten, puedan acceder a una atención psicológica profesional y de calidad.

Requisitos de acceso a la bonificación parcial por discapacidad

Para acceder a una bonificación parcial en el coste de las diferentes modalidades de terapia incluidos en el programa subvencionado para personas discapacitadas por el centro de psicología Canvis de Barcelona es necesario acreditar estar en situación de discapacidad en el momento de inicio del tratamiento mediante la presentación de la tarjeta acreditativa o el certificado que acredite dicha discapacidad.

En Canvis, no sólo queremos ayudar a las personas en situación discapacidad sino también a sus familias. Por ello, los familiares directos de las personas con discapacidad (hijos/as y cónyuges) también estarán beneficiados de bonificaciones parciales en los tratamientos psicológicos incluidos en este programa.

En el programa de bonificaciones parciales en terapias y tratamientos psicológicos a desempleados y familiares directos del centro de psicología clínica Canvis de Barcelona están excluidos los siguientes trastornos:

  • TMS – trastorno mental severo
  • TLP – trastorno límite de la personalidad
  • Adicciones

No es una tarea sencilla ni agradable para las personas con discapacidad alcanzar una vida independiente y sentirse integrado socialmente, ya que los obstáculos físicos y sociales dificultan diferentes actividades. Esto los lleva a buscar entornos admisibles y estables que estén acondicionados a sus capacidades y limitaciones.

En los primeros momentos, uno de los impactos más complicados de sobrellevar es el diagnóstico de discapacidad ya que la persona que recibe el diagnóstico vive un periodo de aceptación que puede conducir a la persona por varias etapas:

  • La negación es aquella sensación repetida con la que se pretende escapar de la realidad a causa de un profundo dolor por enfrentarse a los sentimientos que esa situación le produce. En esta fase, la persona no se siente capaz de defenderse con sus herramientas psicológicas, lo que le lleva a mantenerse en silencio, sentir angustia, experimentar un estado deprimido y en ocasiones a actuar con agresividad.
  • La culpabilidad se expresa después de haber sufrido la colisión inicial. Hace referencia a una sensibilidad que le desgasta y le confronta con preguntas acerca del origen de la discapacidad.
  • El enfado es una fase de malestar e impotencia que puede alcanzar un nivel elevado que le lleve a “tocar fondo”. En esta etapa pueden producirse dos conductas: la autocompasión (llevar un estilo de vida deprimido y de indiferencia, sin ilusión por realizar actividades reforzantes) o entenderlo como una situación definitiva que le suscite a reconducirse con energía.
  • La aceptación va a depender de la persona, ya que puede suponer un proceso que se alcance relativamente rápido o puede requerir de tiempo (incluso años) para conseguirla. No obstante, hay ocasiones en las que las personas viven con tal rechazo que no llegan a aprobar su discapacidad.

En cualquiera de aquellas situaciones en las que la persona perciba dificultades para llegar a alcanzar la aceptación de su propia situación, desde el Centro de Psicología Canvis consideramos importante mostrarles las oportunidades que tienen y que pueden desarrollar. En Canvis deseamos ayudar a estas personas a crear su propia trayectoria y hacia donde pueden obtener una posición cómoda en su ambiente familiar y social

La familia es el soporte principal en las actividades diarias de las personas con discapacidad y en aquellas circunstancias en las que uno se ve perjudicado, los miembros de la familia son sensibles al cambio.

La discapacidad trae consigo un proceso de adaptación en el ambiente familiar a las nuevas circunstancias que en algunas ocasiones solicita una importante atención y puede afectar a la estructura. La asistencia a personas con discapacidad es una responsabilidad que podría comprometer de forma natural a los familiares, alterando los roles que cada uno desempeñaba previamente.

Es probable que los hijos de personas con discapacidad se vean en la situación de comprometerse con uno mismo a cuidar de los padres y verse involucrado en competencias del hogar cuando estas figuras se vuelven dependientes en la realización de sus tareas. Las obligaciones cambian en relación al momento vital y la madurez de los hijos.

Sin embargo, hay realidades en las que el cuidador es un adolescente o un adulto relativamente joven y éstos se encuentran en la posición de asumir un rol ante el cual no se encuentran preparados. En esta fase, los amigos son la figura más relevantes e importantes para su desarrollo y tienen la necesidad de disfrutar de ello, por eso no es fácil adoptar una postura de cuidador en edades tan tempranas.

En el caso de la edad adulta, es posible que entre los progenitores y los hijos ocurra una transformación de roles, es decir, que los hijos tomen una postura de atención de sus padres. También se podría dar la circunstancia de que los hijos de padres con discapacidad a su vez tengan hijos. En esta situación los hijos pueden experimentar una obligación que se ve duplicada y si además todos ellos comparten la misma vivienda, es posible que se viva una tirantez destacable en la casa.

Las discapacidades pueden ser de tipo físicas, sensoriales, psicológicas, intelectuales y mentales o psiquiátricas.

  1. Las físicas-motriz ven restringida o ausente las funciones de las extremidades, siendo las superiores inferiores o de la columna vertebral las más afectadas. Por ejemplo: la distrofia músculo’ esquelética, las artritis y la amputación de miembros.
  2. La sensorial engloba disfunciones desde la ceguera hasta síntomas de visión reducida, borrosa, desenfocada, dificultades para ver de lejos o de cerca, daltonismo, además de la sordera y la ausencia o la dificultad del habla.
  3. La intelectual incluye a individuos que presentan complicaciones para rememorar, solventar conflictos, comprender la información y hacer uso del lenguaje.
  4. La mental o psiquiátrica es aquella conocida por diagnósticos como la depresión o la esquizofrenia.

A continuación, podrán encontrar las enfermedades físicas o psíquicas que pueden dar paso a una discapacidad: discapacidad cognitiva, agorafobia, alcoholismo, Alzheimer, artritis reumatoide, cardiopatías, depresión crónica, enfermedad de Crohn, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, fatiga crónica, fibromialgia, glaucoma, hipoacusia, insuficiencia renal crónica, obesidad mórbida, pérdida de visión y sensibilidad química.

NOTA IMPORTANTE:

Es importante señalar que la bonificación parcial es ofrecida directamente por el centro Canvis y no recibe fondos de organismos públicos ni fundaciones privadas externas.

Situaciones clínicas beneficiarias de la bonificación parcial para discapacitados:

Tipos de terapia incluidas en la bonificación parcial a discapacitados:

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