Eléonore Pourriat, directora de este corto llamado Oppressed Majority, relata una historia basada en un caso real de una violación, pero para darle otro punto de vista, cambia los roles del hombre y la mujer.

El corto fue grabado hace años pero ha sido ahora cuando ha comenzado a ser conocido.

Eléonore Pourriat explicó en The Guardian el por qué de este éxito tan tardío: “En Francia, hace cinco años, la gente me preguntaba si consideraba algo contemporáneo ser feminista. Hoy nadie hace esa pregunta. La lucha feminista es más importante que nunca. Hace cinco años me sentía como un extraterrestre. Ahora mi película está haciendo ruido porque hay derechos en peligro. Mira lo que está pasando en España con el aborto, y toda la homofobia y el sexismo”.

La directora añade que lo que pretendía en su corto era hacer que los hombres sintieran lo que sienten las mujeres. “Muchas veces cuando las mujeres sufren una agresión, la gente dice que es su culpa. Incluso gente cercana. Esto es lo que quería mostrar con mi personaje”.

Reflexión que pone de relieve como el uso del poder de forma desigual y la violencia son los verdaderos causantes de estas situaciones, que en nuestra situación actual siempre suelen recaer en la figura femenina.

Gisela Navarro