¿Qué son las altas capacidades? ¿Qué tipos de altas capacidades existen? ¿Cuáles son sus principales características? En este artículo intentaremos dar respuesta a estas y otras preguntas.

En primer lugar, desearía plantear el siguiente caso: Raúl es un niño que desafía a sus profesores, tras finalizar sus dibujos los rompe en pedazos, su rendimiento académico es bajo, no participa en el aula y no desea acudir a la escuela. ¿Qué puede estar provocando esta conducta en Raúl?

Lo más probable es que se imaginen muchas posibles causas, pero en pocas ocasiones se relacionan estas dificultades con altas capacidades.

Habitualmente, cuando se comenta que un niño tiene altas capacidades, nos viene a la mente la imagen de un niño “sabelotodo”, sentado en primera fila, estudioso, con un lenguaje adultomorfo y con excelentes resultados académicos. No obstante, como veremos a continuación, se trata de un estereotipo que conviene erradicar.

¿Qué son las altas capacidades?

El Grupo de Trabajo de Altas Capacidades (GTAC) propone la siguiente definición:

“El concepto altas capacidades intelectuales engloba a un conjunto de personas que presenta características intelectuales cuantitativa y cualitativamente superiores de manera significativa a la mayoría de la población en una, diversas o todas las áreas de aptitud, sea cual sea la edad de la persona.”

Cabe destacar que las altas capacidades van más allá del coeficiente intelectual. Es decir, para evaluar la existencia de éstas no basta con aplicar un solo test que mida la inteligencia. Será necesario hacer uso de otros instrumentos complementarios.

¿Qué tipos de altas capacidades existen?

Las personas con AACC pueden ser divididas principalmente en los siguientes tres grupos:

  • Niños superdotados
  • Niños con Talento Simple
  • Niños con Talento Complejo

Superdotados

Son niños que tienen una capacidad innata para destacar en cualquier área de conocimiento. Gracias a su creatividad serán capaces de interrelacionar estas distintas áreas entre sí. Se caracterizan por ser niños con una curiosidad insaciable y una alta flexibilidad cognitiva. Joseph Renzulli propone en su Modelo de los Tres Anillos que el niño superdotado debe reunir los siguientes requisitos:

  • Alta inteligencia
  • Alta creatividad
  • Alta implicación en la tarea (el niño se queda absorto en la tarea que le motiva. Es como si el resto del mundo desapareciera, llegando incluso a no responder a su nombre cuando se les llama)

Niños con Talento Simple

Destacan únicamente en un área o aptitud específica. Así pues, tendrán un rendimiento superior en un ámbito concreto, pero en otras áreas pueden mostrar un desarrollo normal o incluso por debajo de la media.

Por ejemplo: El niño con talento matemático presentará una elevada capacidad aritmética y razonamiento matemático. Obtendrá por tanto magníficos resultados en esta área concreta. Sin embargo, es posible que presente dificultades en otras áreas, tales como la verbal o la social.

Existen otros talentos simples como:

  • Talento verbal
  • Talento lógico
  • Talento creativo
  • Talento social

Niños con Talento Complejo

En estos niños se combinan varios talentos.

Dentro de esta categoría estarían el:

  • Talento artístico – figurativo
  • Talento lógico – verbal – memorístico

El talento lógico – verbal – memorístico es conocido también como “talento académico”. Son niños que destacan en su razonamiento lógico, sus aptitudes verbales y en una elevada capacidad memorística. Estos niños poseen la combinación idónea para adecuarse al aprendizaje clásico que ofrecen las escuelas. El sistema educativo actual evalúa los resultados académicos mediante exámenes memorísticos, priorizando la memoria en detrimento de la creatividad y el pensamiento crítico. Por tanto, siempre que estén motivados, obtendrán excelentes resultados académicos.

Históricamente se ha confundido el talento académico con la superdotación. Este se debe a que el profesorado habitualmente equipara el alto rendimiento académico con la superdotación.

Sin embargo, un criterio esencial para diferenciar a los niños con talento, es que los primeros deben poseer una alta capacidad creativa, mientras que, en los segundos, ésta no es una condición necesaria.

¿Qué mitos existen en torno a las altas capacidades?

Lamentablemente, hoy en día siguen vigentes muchos estereotipos con respecto a este colectivo. A continuación, se enumeran algunos de ellos:

  • Al ser inteligentes, obtendrán siempre resultados académicos excelentes

Los niños con AACC suelen verse afectados por una desmotivación en el ámbito escolar. Como ya se ha mencionado anteriormente, la escuela tiene un método de aprendizaje basado en la repetición y la memorización. Esto puede resultar tedioso para estos niños. Por esta razón suelen desconectar de lo que se imparte en clase y dirigen su atención a su mundo interno, que les resulta infinitamente más rico y estimulante. Esto puede conllevar unas calificaciones bajas e incluso el fracaso escolar.

  • Como son tan inteligentes, no necesitan ayuda en la escuela

La realidad es que la mayoría de niños con AACC van a necesitar un plan educativo individualizado (PI) ajustado a sus necesidades, ya que su ritmo y forma de aprender es muy distinta a la de sus iguales.

  • Si obtienen un CI menor de 130 en un test de inteligencia significa que no poseen AACC

Es preciso recordar, que las AACC no se deben evaluar únicamente con un test de inteligencia. Serán necesarias distintas pruebas complementarias (observaciones, entrevistas, pruebas de personalidad, etc.). En lo que a los tests de inteligencia respecta, no se concederá excesiva importancia al CI total, sino que resultará de mayor interés el rendimiento obtenido en las distintas subpruebas.

Por ejemplo: Un niño con un talento verbal puede obtener un resultado por encima de la media en el índice de comprensión verbal y una puntuación normal o por debajo de la media en los demás índices. Por consiguiente, este niño obtendría un CI total dentro de la media y dispondría asimismo de altas capacidades.

  • Es una suerte

A pesar de que muchas personas lo definen como un don, son muchos los que lo conciben como un problema que les dificulta su día a día. El que se viva como un problema o una suerte dependerá en gran medida del entorno en el que se viva. Los niños con estas características podrán prosperar en entornos que les entiendan y potencien su motivación y talento.

¿Cuáles son los posibles rasgos que caracterizan a los niños con altas capacidades?

Cabe resaltar que cada niño con AACC tendrá un perfil único. No existe un rasgo universal que les caracterice. El desarrollo de estas capacidades dependerá en gran medida del contexto familiar, social y escolar. A continuación, se enumeran algunos rasgos muy frecuentes es esta población:

  • Facilidad para adquirir nuevos aprendizajes (esto conlleva que se aburran rápidamente y que la monotonía y repetición les resulte insoportable).
  • Curiosidad insaciable
  • Hipersensibilidad emocional y de estímulos (viven sus emociones de forma muy intensa y pueden presentar dificultades para manejarlas. Pueden mostrarse molestos ante un exceso de estímulos sensoriales).
  • Son grandes observadores de su entorno (podrán advertir detalles que al resto le pasa desapercibido).
  • Perfeccionismo y meticulosidad (a veces son niños que no querrán iniciar una actividad si creen que pueden fracasar en ella. Suelen ser muy autoexigentes).
  • Gran sentido de la justicia y valores morales.
  • Cuestionan las convenciones/normas (pueden mostrarse desafiantes e intolerantes con puntos de vistas que difieren del suyo).
  • Sensación de no encajar (puede que sus intereses se alejen mucho de los de sus iguales. Es probable que se sientan diferentes por no compartir las mismas aficiones y se aleje o sea alejado por sus compañeros).
  • Agudo sentido del humor.
  • Gran capacidad de imaginación (tienen un mundo interior tremendamente rico).

¿Cómo influyen las altas capacidades en la salud mental?

Existen distintas investigaciones aparentemente opuestas con respecto a cómo influyen las altas capacidades en la salud mental. Algunos estudios consideran que las altas capacidades como un factor protector que facilitará que los niños puedan adaptarse a su entorno. No obstante, otros estudios consideran la superdotación como una variable de riesgo a la hora de desarrollar psicopatologías.

Parece que el coeficiente intelectual por sí mismo no es un factor suficiente como para predecir la salud mental del individuo, sino que influirán muchos otros factores, tales momo la familia, el contexto escolar, los rasgos de personalidad del niño, etc.

Tal y como se ha mencionado anteriormente, los niños con altas capacidades tienen una tendencia al perfeccionismo. Esto conlleva a que establezcan metas altamente exigentes. En caso de no alcanzarlas, pueden caer en la autocrítica y desarrollar una baja autoestima, aumentando así el riesgo a sufrir síntomas ansiosos y depresivos.

Debido a la gran capacidad que manifiestan, es habitual que exista una enorme presión por parte de la familia y de la sociedad sobre ellos. Esta exigencia por ser excelentes en todas las áreas, pueden hacerla suya, pudiendo desarrollar rasgos obsesivos-compulsivos.

Es habitual que se describan a sí mismos como diferentes, sintiendo que no encajan. Incluso aquellos niños con altas capacidades que están integrados en su grupo de iguales aseguran sentirse solos. Ello puede conllevar que se aíslen cada vez mas, suponiendo un riesgo para su salud emocional.

Se ha descrito un rango óptimo de inteligencia (CI=125-155), dentro del cual, el riesgo a sufrir problemas emocionales es menor y e el que los niños pueden poseer una autoestima buena y relaciones sociales satisfactorias. No obstante, por encima de este rango, aumenta la probabilidad de sufrir dificultades socio-emocionales. A partir de cierto nivel de inteligencia, resulta más complicado encontrar entornos sociales y escolares que satisfagan las necesidades de estos niños. Así, los superdotados situados más a la derecha de la campana de Gauss, tendrán una mayor vulnerabilidad a padecer trastornos psicopatológicos.

En definitiva, es necesario que el entorno promueva las fortalezas y reconozca la existencia de variables que puedan suponer un factor de riesgo para la salud emocional de este colectivo.

Niñas con altas capacidades

Las niñas con altas capacidades son un grupo de riesgo a la hora de desarrollar trastornos psicopatológicos, especialmente trastornos de ansiedad y del estado de ánimo. Debido a los estereotipos de género en nuestra sociedad, existe un falta de modelos femeninos fuertes. Se espera que las niñas sean menos competitivas y desarrollen más conductas prosociales.

Por este motivo y para no ser rechazadas por su grupo, tienden a ocultar sus potencialidades, incluso cometiendo errores a propósito. Las niñas con superdotación desarrollarán más conductas internalizantes, manifestando más comportamientos ansiosos, depresivos y somáticos.

En cambio, los chicos con altas capacidades, mostrarán más conductas externalizantes, que incluyen comportamientos más agresivos, falta de atención y desobediencia. Esto se debe a que, según las normas sociales, la tristeza es considerada como una emoción poco masculina, mientras que el enfado está más aceptado en los varones.

A pesar de que exista la misma ratio de niños y niñas con superdotación intelectual, muchas niñas quedan sin detectar. Por cada 5 niños identificados, únicamente se identifica una niña en promedio. Se debe ser consciente de estas técnicas de enmascaramiento utilizadas por las niñas para evitar que pasen desapercibidas. Asimismo, es necesario promover un discurso en el que se favorezca el liderazgo por parte de las mujeres.

¿Cómo reaccionan los padres ante la identificación de la altas capacidades en sus hijos?

Una vez se les comunica a los padres que su hijo posee altas capacidades la reacción puede ser diversa. Por un lado, se tranquilizan al saber que lo que tiene su hijo no es nada patológico, pero por otro lado, sienten que la infancia del niño no va a ser fácil y que probablemente tendrán mayores dificultades que los niños sin esta condición. Muchas veces acuden al psicólogo con gran preocupación y ansiedad, por no saber si serán capaces de manejar la situación.

A partir de este momento los padres tendrán que ser orientados para poder ofrecer a sus hijos el apoyo necesario, tanto intelectual como emocional.

La principal preocupación de los padres son las dificultades de socialización del niño. A menudo les cuesta hacer amigos ya que sus intereses difieren a los de la mayoría de los niños de su edad. Suelen entenderse mejor con los adultos. Sin embargo, emocionalmente son niños asincrónicos. Es decir, presentan un desarrollo cognitivo acelerado, mientras que su desarrollo emocional está dentro de la normalidad o incluso pueden ser emocionalmente inmaduros.

Otra de las inquietudes es el colegio. Muchas veces, los padres tendrán que iniciar una lucha para que el lugar donde estudian respondan a sus capacidades especiales. La legislación es clara, sin embargo, en la práctica, muchas escuelas no disponen de los recursos suficientes para poder darles el apoyo necesario.

A menudo los padres deben insistir para que acepten el diagnóstico y entiendan que van a necesitar ayuda. En ocasiones, los tutores tienen la idea preconcebida de que por ser más capaces no van a necesitar apoyo. Por ello resulta crucial, formar a los profesores en la detección e intervención de las altas capacidades.

¿Qué es la doble excepcionalidad?

Este término implica que las altas capacidades pueden coexistir con algún trastorno, tales como:

  • TDAH (trastorno por déficit de atención)
  • TEA (trastorno del espectro autista)
  • Trastorno del aprendizaje

Esta combinación dificulta la detección de las AACC o bien del trastorno asociado. Así pues, un niño que presente un déficit de atención y una gran pasión por la lectura realizará un sobreesfuerzo durante esta tarea. Por tanto, el niño intentará compensar su déficit, pudiendo quedar éste oculto. Por otro lado, el trastorno puede llegar a enmascarar las altas capacidades.

En suma, resulta crucial una identificación temprana de estos niños con el fin de poderles brindar el apoyo académico, social y emocional necesario.

El Centro de Psicología Canvis ubicado en Barcelona cuenta con un equipo de psicólogos que pueden brindar su apoyo tanto en la evaluación como en la intervención de este colectivo.

Para más información, remito al lector a la Guía actualizada del Grupo de Trabajo de Altas Capacidades (GTAC) del Colegio Oficial de Psicólogos de Cataluña (COPC) y del Grupo de Investigación en Altas Capacidades (GRAC) del Colegio de Pedagogos de Cataluña (COPEC).

Referencias bibliográficas

Grupo de trabajo de Altas Capacidades, Grupo de Investigación en Altas Capacidades (2018).

Altas Capacidades Intelectuales. Colegio Oficial de Psicología de Catalunya (COPC) y Colegio de Pedagogos de Catalunya (COPEC)